Querida, o debería decir temida muerte:
Durante muchos años has estado presente en la mente de quienes tienen un corazón latente, nadie sabe tu género o proveniencia pero todos caen inevitablemente en tus manos hasta el final de sus días. Siempre me he preguntado si realmente hay algo más allá del momento en el que pasas por donde alguien y te llevas su último aliento o si seremos seres tan insulsos que solo nos queda desvanecer, supongo que eso solo se podrá descubrir cuando llegue el respectivo momento de partir. ¿Por qué te temerán tanto? La vida misma te incluye en su final, eres algo con lo que hay que vivir y convivir, inevitable. Todos tienen mil teorías acerca de qué o quién eres, por lo general te representan como la villana de la historia, como el ser malvado que se lleva todo a su paso, pero quizás sea al contrario, quizás solo llevas lo que no se puede quedar en la tierra a un lugar de paz, menos tóxico. No te temo y aunque es difícil aceptar que por ti perdamos personas cercanas, es el final del ciclo que debemos experimentar. El dolor no siempre tiene que estar desligado de la felicidad, a veces tú eres quien los une, a veces otros factores que quién llamarías tu oponente (la vida) nos pone en el camino.
Nunca dejes tu vocación pues el mundo se volvería aún más caótico, no habría un fin para el mal ni un principio para el bien. Nos veremos en algún momento, adiós.
Genji Medina
@just.like.gen
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